Bien sabemos que los beneficios que nos aporta correr son ilimitados. Correr, o lo que cada vez es más conocido como “running”, es uno de los deportes más completos que puedes hacer y que ofrece a tu sistema cardiovascular un excelente entrenamiento. Además, está científicamente demostrado que correr aumenta tu calidad de vida y tu estado emocional. Pero lo que todo aficionado al running debe tener en cuenta, y que muchas veces no nos paramos a pensar, es en la importancia del descanso, que también debe forma parte nuestro entrenamiento. Seguro que para muchos runners el descanso suena casi como una palabrota o un castigo, pero debemos tener en cuenta que descansar entre entrenamientos no te hace menos “fit”, sino todo lo contrario. ¿Sabías por ejemplo que, al descansar, reduces el riesgo de lesionarte? En este post te vamos a contar por qué el descanso entre entrenamientos es imprescindible.
Dale a tu cuerpo tiempo para recuperarse
Como un buen runner te preguntarás cuántos días de descanso son recomendables, podemos decirte que esto varía mucho según la persona. Lo recomendable para una recuperación activa es un día o dos, consiguiendo de esta forma que el cuerpo se recupere del estrés que el running provoca a las articulaciones durante las sesiones de entrenamiento.
Reposa para repostar
Estos días de descanso son tan importantes porque de esta forma conseguimos que el cuerpo pueda recuperar y adaptarse a la carga de trabajo, obteniendo mejoras en nuestra condición física. Al dejar que el cuerpo descanse y se recupere de forma adecuada podrás aguantar más tiempo en tus próximos entrenamientos y alcanzarás niveles más altos de rendimiento. Dicho de otra forma; para ser más rápido y obtener mejores resultados es imprescindible tomar tus días de descanso.
Evita burn outs
Aparte de las ventajas físicas de descansar entre entrenamientos, no podemos descartar las ventajas que tiene el reposo para tu mente. Recuerda: Mente sana, cuerpo sano; dicho que nos viene como anillo al dedo en este caso. Tomarse su tiempo para cargar las pilas es muy importante para los runners y de esta forma obtener esa lucidez mental y prevenir los conocidos “burn outs”, o estrés al que sometemos a nuestra mente.
También debemos tener muy en cuenta que un día o dos de descanso no equivale a no hacer ningún deporte. Esto es a lo que comúnmente se le llama “descanso activo”, donde podemos pensar en ejercicios de estiramientos estáticos o dinámicos, montar en bicicleta o la natación, que no solo es relajante, sino que además utilizas todos tus músculos. También los ejercicios de cardio vienen muy bien, ya que permiten que suba nuestra frecuencia cardíaca un poco por encima de lo normal, retando así a tu rango de movimiento.
Lo más importante, aunque suena un poco cliché, es que escuchemos a nuestro cuerpo, que nos dirá lo que necesitamos.
¿A que tomar un descanso entre entrenamiento ya no suena tan mal? Si, además, quieres más consejos sobre cómo mejorar tus entrenamientos sobre running, te recomendamos que leas nuestro post sobre diferentes formas de aumentar la distancia de tus entrenamientos.